EDITORIAL
En el editorial del mes pasado (diciembre 2018), después de hacer un repaso de acciones significativas realizadas por vecinos desde muy diferentes sectores, durante el año pasado, terminábamos con el siguiente párrafo:
De esta manera podremos proyectar con alegría el próximo año 2019, que muy probablemente será “histórico” en lo político y social. ¿Y por qué no, hacerlo también “histórico” en lo personal, acompañando estos grandes cambios?
¿… y cómo podremos llevar adelante “este reto”? Por nuestro lado, nos comprometemos a sacar cada mes en una nueva sección llamada “ViVE Vallecas”, reportajes y entrevistas de personas y colectivos referentes por su trayectoria personal, emprendedora, social, etc. Este mes hemos empezado con una entrevista (en las páginas centrales) a Marina Marroquí, acompañada de Ismael Serrano.
También hemos iniciado la sección “Vallecas lee en sus bibliotecas”, un recorrido por las bibliotecas públicas con recomendaciones de algunos de los libros que albergan.
De sus inicios, en Vallecas VA, nos hemos emplazado como un medio de comunicación en el que queremos dar a conocer y resaltar todo aquello que “VA” en Vallecas. Aquellas realidades, intentos y aspiraciones surgidas de lo mejor de los vecinos.
Pero además de ello, no queremos ser agentes pasivos ante este año cargado de un fuerte componente electoral. Al menos, tendremos elecciones municipales, autonómicas y europeas en el mes de mayo.
Al igual que hicimos hace 4 años, en el 2015, haremos campaña para animar a los vecinos a que voten y a que den un paso más: hacer campaña activa entre su gente más próxima, a intercambiar, debatir, intentar persuadir, etc. En definitiva a asumir con la mayor responsabilidad posible este momento político, que nos da un pequeño espacio de participación.
Estos últimos años, hemos visto crecer “la confrontación”, “el choque” en casi todos los campos del quehacer humano. Sigamos haciendo crecer aquello que se nos da bien a los vallecanos: construir desde la gente, desde lo colectivo, multitud de realidades. De esa manera estaremos poniendo nuestro grano de arena en hacer crecer la noviolencia como fuerza moral, social y personal superadora de la creciente confrontación violentista a la que nos está llevando el final de este sistema.
