Por I. M.
El confinamiento motivado por la crisis sanitaria de la COVID-19 ha agravado la vulnerabilidad social de un parte de la población de los distritos de Puente y Villa de Vallecas que, gracias fundamentalmente a la rápida creación de las redes vecinales de apoyo, ha podido cubrir en buena medida sus necesidades alimentarias.
Esta solidaridad es y ha sido siempre una de las señas de identidad de la mayoría de los vallecanos y vallecanas que no se merecen que en estos momentos de repunte de contagios en toda la ciudad de Madrid se les estigmatice y se les culpe de la expansión de la pandemia y que hasta se les inste a que salgan lo imprescindible de sus viviendas. Incluso han tenido que escuchar barbaridades del tipo de que los barrios del Sur y el Este son estercoleros multiculturales desde un sector de las fuerzas políticas más recalcitrantes y reaccionarias de la derecha. Y todo con cifras sesgadas, alarmistas, con porcentajes de contagios a raíz de la realización de unas pruebas PCR a una minoría de la población, cuyos datos se extrapolan al conjunto de habitantes que, en su mayoría, se afanan en su día a día para salir adelante.
En lugar de todo esto, las dos Vallecas necesitan más prevención a través de unos mejores servicios públicos, con más personal en los desbordados centros de salud cuyos profesionales luchan a diario para defender una Atención Primaria vital para frenar esta enfermedad. También más medios humanos y materiales en los centros educativos y un mejor transporte público que evite el hacinamiento a diario en autobuses, metros y trenes, haciendo imposible respetar la distancia social de seguridad y siendo caldo de cultivo de la enfermedad. En este punto, conviene, de igual modo, hacer un llamamiento a la responsabilidad individual de cara al cumplimiento de las normas básicas para frenar la propagación de la pandemia.
Desde Vallecas VA también apelamos a utilizar con rigor y sin connotaciones negativas la palabra Vallecas, que engloba un buen número de singularidades y realidades, tantas como los cerca de 347.000 habitantes que tienen Puente (236.000) y Villa de Vallecas (111.000).
