Por Redacción
La Audiencia Provincial de Madrid tenía previsto juzgar del 6 al 9 de abril a los dos responsables de un vertedero ilegal en Valdemingómez por el incendio que se declaró en junio de 2015 debido a la acumulación de basura y escombros, lo que produjo un foco de emisiones contaminantes para los vecinos de la zona. Sin embargo, el proceso ha tenido que ser suspendido al no presentarse en la vista oral uno de los acusados.
El fuego, que duró 17 días, se originó en la zona de la Cañada Real-Camino de la Leña, entre el distrito de Villa de Vallecas y Rivas Vaciamadrid. A pesar de haber sido denunciados los responsables en innumerables ocasiones por la Policía Municipal de Madrid, continuaron con su actividad.
Ecologistas en Acción, personada en la causa como acusación popular, sostiene que la combustión de materiales y consiguiente contaminación pudieron ser constitutivos de los delitos de contaminación y de acumulación de residuos peligrosos. Del primer delito se acusa a ambos solicitándose la pena de 6 meses de multa con cuota diaria de 25 euros. Mientras que solo uno de ellos se le imputa el segundo delito, por el que se le piden 6 años de cárcel.
Además, los acusados, como titulares de la Sociedad Limitada “Recuperación de Chatarra Valdemingómez”, deberán responder conjunta y solidariamente en la cantidad de 3 millones de euros a que asciende el coste de la restauración el medio natural dañado, a realizar por la Consejería de Medio Ambiente. Procede la restitución de las parcelas usurpadas a sus propietarios tras su restauración.
Más de 7 años de actividad
Desde 2008 se vinieron desarrollando actividades de acumulación de vertidos de residuos de construcción y demolición, junto con otros de carácter peligroso, en varias parcelas de la zona referida, sin ningún tipo de licencia, que llegaron a alcanzar una altura de 12 metros y un volumen de 275.000 metros cúbicos de residuos.
Los responsables de esta actividad recibían los residuos en una parcela alquilada, cobrando 20 euros o entre 40 y 50 euros, dependiendo del tipo de camión pequeño o grande. Posteriormente distribuían los materiales mezclados entre nueve parcelas colindantes de diferentes titulares, sin ningún tipo de conocimiento, autorización o permiso de actividad de los mismos.
Neumáticos, material inflamable, telas asfálticas, aislantes de tejados y de frigoríficos, envases de lubricantes, residuos plásticos y tóxicos, acabaron ardiendo o en combustión interna, con el consiguiente peligro de toxicidad para el vecindario citado durante 17 días de junio, con grandes columnas de humo que tardaron en remitir 15 días.