Por Raúl González
El Rayo Vallecano volvió a la senda de la victoria en Vallecas y continúa invicto tras 16 jornadas ligueras disputadas. A su vez, el Espanyol intentó frenar la dinámica franjirroja, pero le resultó imposible.
El conjunto vallecano comenzó el partido de manera inmejorable, con intensidad y ocasiones peligrosas que animaron a su afición en los primeros minutos de partido. Además, el juego directo de Andoni Iraola con superioridad en los costados sorprendió a Vicente Moreno que se vio superado en todas las facetas del juego.
Sin embargo, las mejores ocasiones llegaron del lado perico en esta primera mitad. Un buen cabezazo del exrayista Raúl de Tomás obligó a emplearse a fondo a Stole Dimitrievski, que mantuvo su portería a cero una vez más.
El partido llegó al descanso con el 0-0 inicial. El técnico local aprovechó el tiempo de parón para dar indicaciones a sus jugadores y cambiar ciertos aspectos del juego, para mejorar al equipo.
Antes de llegarse a la media hora de partido, Álvaro García se internó por la banda izquierda y centró el balón al área, con la fortuna de que golpeó en el defensa central visitante Cabrera y se introdujo en su propia portería (min. 58).
Los de la franja se pusieron el mono de trabajo para afrontar los compases finales del encuentro, en los que sufrió en todos los aspectos del juego. La afición fue el jugador número 12 y apoyó al equipo hasta el pitido final.
El Rayo Vallecano, aunque acabó pidiendo la hora, consiguió los tres puntos ante el Espanyol y se sitúa a dos puntos de los puestos de Champions League.
Su próximo compromiso liguero será en el Estadio de la Cerámica el domingo 12 de diciembre a las 14 horas frente al Villarreal Club de Fútbol.