Por Grupo 24 horas AA Madrid
Aunque solo tiene 24 años, a Megan la fiesta del alcohol le duró bien poco. Enseguida se dio cuenta de que no se divertía, de que se sentía sola entre todos. Cocaína, speed, pastillas, alcohol… nada le era suficiente para calmar su ansiedad y su vacío. Convertida en un cóctel de alcohol y drogas, acabó perdiendo, a pesar de su juventud, las ganas de vivir, haciendo cosas que no quería hacer y degradándose como ser humano. Fue entonces cuando llegó al Grupo 24 Horas de Alcohólicos Madrid, situado en Puente de Vallecas, donde le preguntaron si quería dejar de sufrir. Poco a poco, lo está consiguiendo y ha vuelto a sonreír, por fuera y por dentro, sin la necesidad de sustancia alguna.
P: ¿Cómo te diste cuenta de que tenías un problema con el alcohol y otras drogas?
R: Por mi forma de consumir, que ya no era la misma de hace 5 o 6 años atrás. Me di cuenta de que había progresado algo en mí, que no sabía qué me estaba pasando. Entonces fue como… ¡Dios!
P: ¿A qué edad empezaste a beber y consumir?
R: Con pastillas empecé desde muy pequeña, igual con el alcohol. Probaditas de alcohol más pastillas, concretamente ansiolíticos, porque era una niña bastante inquieta y necesitaba tranquilizarme.
P: Hay un nexo social entre el alcohol, las drogas, y la noche y la fiesta. ¿Tú te lo pasabas bien?
R: Había ocasiones en las que siento que me lo pasaba bien entre comillas, pero la mayoría de las veces no fue así. Siempre era como tener que fingir que lo estaba pasando bien. Yo no iba a bailar, iba a consumir.
P: ¿Llegaste a tocar fondo?
R: Sí, me pasaron muchas cosas que yo pensaba que nunca me iban a pasar. Cosas que uno piensa que no van a llegar. Pues yo llegué a eso y acabé muy destrozada. No tienes control de nada, y sentir que no tienes control sobre tu vida es horrible.
P: Tú eres muy joven. ¿Crees que el hecho de ser mujer y alcohólica sigue siendo un estigma con relación a los hombres que tienen el mismo problema?
R: Sí, tanto con el alcohol como con el consumo. Cuando he tenido relaciones era complicado, porque yo tenía que dar la imagen de “chica buena”. Me reprimía mucho y me daba mucha vergüenza que mi familia se enterase.
P: Habrás bebido y consumido a escondidas…
R: Claro, yo consumía y bebía en mi cuarto a solas. Cerraba la puerta con llave y hacía de todo para que mi familia pensara que yo no estaba allí tomando ni consumiendo.
P: ¿Cómo te está ayudando al Grupo 24 Horas de Alcohólicos Anónimos Madrid?
R: Me está ayudando a conocerme de una forma que yo nunca hubiera pensado. Estoy teniendo paz por momentos, una paz que nunca he tenido. Siempre ha sido dolor y puro sufrimiento. Cuando llegué al grupo me preguntaron si quería dejar de sufrir. Fue algo que me marcó mucho, porque yo nunca pensé si en algún momento iba a dejar de sufrir y es algo que estoy logrando muy poco a poco. Es muy bonito.
Si tienes problemas con tu forma de beber o consumir, hay una solución:
Grupo 24 horas de Alcohólicos Anónimos Madrid
C/ Julia Mediavilla, 27
Tel. 625 18 24 71