EDITORIAL |
Título sugerente el de las jornadas de trabajo organizadas por la Coordinadora de AA.VV. de Vallecas el 25 y 26 de octubre. Tarea nada sencilla con la actual situación que vivimos, una de cuyas características más significativas es la de la “imprevisibilidad” de lo que pueda acontecer en las facetas más importantes de la vida de las personas, de los Gobiernos, de los Estados, etc.
No es lo mismo “pensar” qué hay que hacer para mejorar unas determinadas situaciones y políticas que “repensar” cuando los parámetros, esquemas, miradas y sensibilidades que han estado actuando hasta ahora ya no valen, se quedaron caducos y obsoletos. En esta situación, ¿cómo hay que hacer para repensar algo? Sin embargo, es imprescindible analizar, debatir, intercambiar y esbozar una “hoja de ruta”. Pues el mañana, inexorablemente, va a llegar.
El antiguo e inhumano mundo que ya “ha muerto”, aunque todavía sigue dictando sus leyes (y llevándose a gente por delante), se basaba en el dinero y en el individualismo. Pero cuando se actúa sin cálculo personal, cuando la acción se realiza con humildad y con el corazón por delante, por el simple hecho de querer el bien común, cuando eso es lo que sustenta la acción social, es que esa acción tiene sentido y tendrá futuro, aunque en lo inmediato no se vean las consecuencias.
¿Cómo interpretar el surgimiento inesperado de la Marea Verde? ¿Acaso aquellos que pusieron en marcha la camiseta verde lo hicieron calculando que a los años sería un símbolo en las nuevas expresiones de la lucha social? Con seguridad aquello surgió desde una genuina rebelión contra la creciente inmoralidad de los Gobiernos de turno.
Por otro lado, se vislumbran situaciones interesantes en el entramado asociativo en Vallecas, como el de jóvenes que están participando en asociaciones de vecinos y, junto con gente mayor, de larga trayectoria, van viendo cómo ir haciendo piña, todos a una. Ahí se están gestando las nuevas relaciones que han de reemplazar al antiguo prejuicio e individualismo.
Hoy, que “todo” está tocado por una crisis global (en todos los rincones del planeta y en todos los aspectos de la vida), pensar cualquier ámbito pasa por “repensar” cuestiones básicas de la propia vida y de la relación con los demás. Ya que, si somos sinceros con nosotros mismos, podremos ver que también nosotros, en parte, hemos de “rehacernos”.
“Nuestro Vallecas” solo será desde algo muy querido, muy sentido y sintonizado. Que apenas necesite de palabras y sí del encuentro de miradas.