Por Raúl González
El Rayo Vallecano encaraba en casa en la tarde noche del 30 de marzo uno de los partidos más importantes de la temporada con un descanso mayor al habitual debido a la suspensión del anterior duelo ante el CD Mirandés, por casos de coronavirus, y con un rival mermado, el Sporting de Gijón, por las bajas de sus futbolistas más determinantes por el parón de selecciones. Sin embargo, no dio la talla, cayó derrotado por 0 a 1 y desaprovechó una oportunidad de oro para reengancharse a la lucha por los puestos de ascenso directo.
El Rayo tardó en entrar al partido varios minutos, los cuales aprovecharon los sportinguistas para adelantarse en el electrónico tras un gran gol de Díaz (min. 15) desde fuera del área ante un disparo que no pudo hacer nada Luca Zidane. Con el marcador adverso, como viene siendo habitual en las últimas jornadas ligueras, los locales intentaron la remontada con diversas ocasiones claras, pero sin acierto de cara a la portería.
Sin duda alguna se repuso bien al gol encajado, intentando llevar el control del balón en todo momento, profundizando sus jugadas por ambos costados y terminando jugadas con peligro en todo momento. No obstante, esto fue un espejismo, porque la segunda parte no tendría nada de esta identidad del conjunto rayista.
Cambios en el descanso
El partido llegó al descanso con esta ventaja para el conjunto asturiano. Andoni Iraola introdujo variantes para intentar cambiar el resultado y aportar aires nuevos al equipo. A pesar de estas alternativas, los refuerzos también resultaron insuficientes para revertir el resultado.
El resto fue un constante quiero y no puedo por parte de la entidad franjirroja, ante una defensa férrea, intensa y colocada del Sporting de Gijón que dificultó en demasía los ataques de los de la franja e imposibilitó que estos progresaran con peligro.
El Rayo terminó el partido desesperado por las constantes pérdidas de tiempo del conjunto asturiano, pero los tres puntos viajaron con la entidad rojilla. El club vallecano termina en sexta posición, pese a esta derrota que ha cortado su dinámica positiva.