Por Concha Párraga, Patricia Carlavilla y Marisa Gascón, enfermeras de familia, y Hodan Sulaman, técnica Médicos del Mundo
Todos los días son 25 de noviembre. Todos los días en algún lugar del mundo, de nuestro país, de nuestra comunidad autónoma o de nuestro barrio, hay una mujer que sufre de algún tipo de violencia. Violencia contra la mujer en forma de muerte, de agresión física o verbal, o de abuso psicológico.
Como persona, mujer y enfermera me gustaría dar voz a un número elevado de mujeres que han sufrido y siguen sufriendo las consecuencias de otro tipo más de violencia de género, la Mutilación Genital Femenina (MGF).
Esta práctica refleja una desigualdad entre sexos muy arraigada, constituye una forma extrema de discriminación contra la mujer, es una forma más de violencia de género y, por supuesto, es una clara violación de los derechos humanos de las mujeres y las niñas.
La OMS define la Mutilación Genital Femenina como todos aquellos procedimientos que, de forma intencional y por motivos no médicos, alteran o lesionan los órganos genitales femeninos.
En España, en febrero de 2020 había aproximadamente 18.000 niñas en riesgo de ser mutiladas, niñas procedentes de países donde se sigue practicando. Con datos del padrón de 2019 en nuestra comunidad autónoma había 7.389 mujeres procedentes de países donde se practica la mutilación y 1.776 niñas menores de 15 años en riesgo de ser mutiladas
Las consecuencias para la mujer son muy graves tanto desde el punto de vista físico (hemorragias, infecciones, problemas sexuales y en el parto, muerte) como problemas psicológicos y de pareja.
Debo aclarar que España tiene un marco legal muy claro con respecto a la MGF. El código penal español en el artículo 149 contempla la MGF como delito de lesiones siendo castigado con pena de prisión de 6 a 12 años y pérdida de tutela o patria potestad de 4 a 10 años. En la ley orgánica de 2005 se castiga la MGF que se practica a fuera de nuestro país. Y nuestra propia comunidad autónoma tiene una Ley de Violencia de Género que hace referencia a la mutilación de forma explícita.
Exposición ‘Mi lucha, nuestra lucha’
En la actualidad, los vecinos de Vallecas tenemos la posibilidad de poder disfrutar de la exposición de fotografías de ‘Mi lucha, nuestra lucha’ en el Centro de Salud Ángela Uriarte que nos ha cedido temporalmente la ONG Médicos del Mundo con quien colaboro y siempre gracias a la inestimable colaboración de Hodan Sulaman, mujer somalí y técnica en Intervención y Mediación en el Proyecto de Derechos Sexuales y reproductivos de dicha ONG y vecina de Vallecas.
Sé que es un tema muy duro, que cuesta trabajo tratar. Sé que estamos en puertas de la Navidad y a todos nos apetece temas más “amorosos”, pero creo que es importante que nos concienciemos todos, que podemos ayudar a nuestras vecinas africanas, que les tendamos la mano, que creemos una red fuerte, firme, en la que puedan apoyarse tanto ellas como su comunidad y de este modo se pueda dar fin a esta práctica atroz. ¡Qué mejor Navidad que esa!.
Este es mi deseo navideño. Todos juntos contra cualquier tipo de violencia contra la mujer. Os deseo a todos Feliz Navidad y como decía el poeta y cantautor: “libre te quiero”.