Por Raúl González
Vecinos de Entrevías denuncian el mal estado de algunas calles de su barrio, más concretamente las de Serena y Benamejí. El asfalto de estas vías está muy deteriorado, dificultando el día a día de las personas que viven allí y que piden soluciones.
Estos residentes se encuentran en pie de guerra. Entre baches y socavones, conviven y realizan las tareas cotidianas a duras penas. Carmen, vecina de Entrevías, asegura: “No han arreglado estas calles nunca en 60 años y se han producido muchas caídas y lesiones”.
Su hartazgo es evidente. Elvira, otra vecina del barrio, manifiesta su inseguridad argumentando que tiene que ir agarrada siempre de una persona porque “tiene que salir porque no hay más remedio” y tiene mucho “miedo”.
Alicia y Concha, dos residentes más, consideran que es una “vergüenza el barrio que tenemos”. Ambas salen a la calle de la mano para tener un apoyo en sus paseos y, además, siempre están mirando al suelo para encontrarse más seguras.
El miedo es tan real entre los vecinos que, hasta incluso algunos, como Magdalena, suman dos años sin pisar la calle por temor a sufrir alguna caída debido a su edad. “Me caí un día, y fue una caída tremenda. No me atrevo a salir a ningún sitio”, reconoce.
El Ayuntamiento de Madrid explica que estas calles no son titularidad municipal, pero que, aun así, intentarán buscar una fórmula para dar respuesta a la actual problemática de estos vecinos.