Por Redacción
El próximo día 22 de octubre la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) retoma una de sus varias luchas históricas vecinales: la regeneración y recuperación del río Manzanares como el eje vertebrador de los distritos de Puente y Villa de Vallecas, Villaverde y Usera y su entronque con el resto de la capital.
Estos cuatro distritos conforman el sur de Madrid y son el ejemplo de las desigualdades existentes entre las diferentes zonas que componen la capital de España, ya sea en rentas, en el nivel de educación, en nivel de fracaso escolar, en desempleo, en calidad de vivienda, etc…
La FRAVM entiende que todo el espacio comprendido entre el puente de Méndez Álvaro, la M-30, el nudo supersur y las barrios aledaños a ambas riberas del río Manzanares hasta entroncar con el Parque Regional del Sureste como una oportunidad que se brinda a la ciudad y en especial a estos barrios para el reequilibrio de la ciudad, mejorando la calidad de vida tanto en dotaciones, en equipamientos, en infraestructuras, en una gran superficie de cientos de miles de metros cuadrados donde merece la pena debatir y realizar una lluvia de ideas a la cual están convocados todos los ciudadanos de Madrid.
Estas jornadas que comienzan el próximo sábado en el albergue juvenil de San Fermín, situado al final de la avenida de los Fueros casi junto a la Caja Mágica, de 10:30 a 14 horas, se van a estructurar en cuatro mesas de trabajo diferentes.
La primera mesa de trabajo se denomina ‘Regeneración del río’. Se trata de proponer ideas para recuperar el río Manzanares como un río vivo y un río visible, agradable, atractivo, amistoso tanto en su cauce como en sus riberas aledañas y su bosque de galería que fomente la biodiversidad, con un tratamiento paisajístico y no como sucede actualmente que más que un río es un azud que evacua las aguas depuradas que no regeneradas de la ciudad y en algunos tramos se encuentra muy encajonado en taludes muy verticales. También ver qué soluciones existen para sus arroyos como el de La Gavia o el de la Bulera.
En la segunda de ellas, ‘Equipamiento y conexión con los barrios’, se trata de aportar todas las ideas sobre qué equipamientos, dotaciones, infraestructuras y usos se van al suelo existente y aquel que se va a liberar por la posible desaparición de la depuración de la China o en su caso una nueva China mucho más compacta que ocuparía la tercera parte de la actual. En cuanto a los suelos de la estación de contenedores de Abroñigal, cómo va a influir la desaparición de los viaductos de Puente de Vallecas y de Méndez Álvaro, qué se propone para permeabilizar el nudo supersur de la M-30 y qué Madrid Río se prolongue hacia el Sur.
La tercera mesa es para debatir sobre la cultura e historia de este tramo del río Manzanares, cómo se puede divulgar, cómo se puede poner a disposición de los ciudadanos o cómo se puede visitar.
La cuarta mesa, como no podría ser de otra forma, es para debatir y aportar ideas sobre la agroecología urbana y cómo se puede aplicar en esta zona, desarrollar o implementar de forma que esté al servicio no solo de estos cuatro distritos, sino de toda la ciudad.
