Por Isa Mendi
La dirección de los hospitales Infanta Leonor y Virgen de la Torre hace balance en esta entrevista con Vallecas VA del estado de la atención sanitaria en los centros de referencia de los vallecanos en plena crisis sanitaria de la COVID-19.
P: ¿Cómo es la situación actual en el Infanta Leonor y en el Virgen de la Torre con respecto a la pandemia?
R: Nuestra organización está centrando sus esfuerzos actualmente en diseñar estrategias para ir retomando progresivamente la atención presencial a todos los pacientes que puedan acudir tanto afectados por COVID-19 como libres del virus a través de circuitos seguros diferenciados, extremando las medidas de seguridad para todos. Pero siempre con gran cautela y sentido de la responsabilidad, para no comprometer la disponibilidad de recursos si tuviéramos que afrontar un repunte de la enfermedad.
P: ¿Ha pasado ya lo peor?
R: El Infanta Leonor pasó en una semana de ser un hospital general con diferentes especialidades a ser el primer hospital COVID-19 de la Comunidad de Madrid, teniendo que reorganizar las infraestructuras y a los profesionales para atender sólo este tipo de pacientes. Dejamos de atender niños, realizar consultas, intervenciones quirúrgicas y los facultativos especialistas dejaron a un lado su especialización para trabajar todos a una atendiendo a los pacientes COVID-19. Tras varias semanas consecutivas de marzo con una presión asistencial extraordinaria, el mes de abril trajo consigo una mejoría notable de la situación, que se tradujo en una menor presión asistencial tanto en urgencias con en hospitalización, tendencia que se mantiene a día de hoy. No obstante, aunque la situación invite al optimismo, debemos ser prudentes. El periodo de incubación de la enfermedad puede hacer que en los próximos días se produzca un repunte en aquellas personas que han vuelto a su actividad laboral y tenemos que estar preparados para, en ese caso, atenderlos con agilidad. Desde el inicio de la pandemia hasta el 15 de abril, el número de altas clínicas dadas a pacientes hospitalizados con COVID-19 confirmado (PCR positiva) ascendió a 761 en el Hospital Universitario Infanta Leonor y a 82 en el Hospital Virgen de la Torre.
P: ¿Cómo es el día a día en los dos hospitales vallecanos?
R: Afrontar esta pandemia ha sido un reto de dimensiones extraordinarias, tanto en lo asistencial como a nivel logístico y de gestión de recursos. En cuanto a recursos humanos, nuestra organización (Hospital Universitario Infanta Leonor y Hospital Virgen de la Torre) ha realizado 413 nuevas contrataciones de profesionales sanitarios: 23 facultativos especialistas, 9 médicos internos residentes (MIR) de primer año, 168 enfermeras, 181 auxiliares de enfermería y 32 estudiantes de enfermería de 4º año. Aparte, cabe destacar el refuerzo que también ha supuesto la ampliación de la jornada de trabajo de 73 profesionales sanitarios (12 facultativos, 46 enfermeras, 1 matrona y 14 auxiliares de enfermería) que ya estaban contratados antes con jornadas reducidas y que han visto incrementada su jornada hasta el 100 por 100. Así como las incontables horas que muchos profesionales han dedicado a la asistencia, por encima de su jornada laboral ordinaria, sin importarles que fuera sábado o domingo. Además, en lo que se refiere a los servicios no sanitarios se han realizado 84 contrataciones (6 en restauración, 32 TIGAs – celadores, 2 en almacenes, 1 administrativo, 33 en limpieza y 10 en gestión de residuos). Respecto a los protocolos clínicos, la actividad se ha guiado desde el principio por los procedimientos de actuación del Ministerio de Sanidad y la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid. En cuanto a los medios de protección sanitaria, hemos trabajado con diligencia y gran esfuerzo para dotar de material adecuado a nuestros profesionales, teniendo que racionalizar su uso para garantizar en todo momento las existencias de material. En ningún momento hemos tenido rotura de stock, ya que desde la Dirección se empezó a trabajar desde muy pronto para poder disponer del material mejor. La inesperada rapidez con que la pandemia afectó a los vallecanos, unido a desabastecimientos puntuales de material homologado tanto en el mercado nacional como internacional, ha hecho que en algún momento dispusiéramos de material de menor calidad, pero que ha garantizado en todo momento la seguridad de los profesionales en los dos hospitales.
P: ¿Sigue siendo el Infanta Leonor un centro específico para enfermos COVID-19?
R: A consecuencia de la pandemia, el Hospital Universitario Infanta Leonor ha tenido que acometer un despliegue y transformación extraordinarios de sus recursos e instalaciones y también una profunda reordenación de la actividad asistencial. En este sentido, se está haciendo un gran esfuerzo por parte de los servicios médicos para mantener el contacto con los pacientes de forma no presencial, mediante llamadas telefónicas de control y seguimiento, así como a través de telemedicina. Y algunas unidades, como Diálisis y el Hospital de Día onco-hematológico han seguido funcionando en todo momento extremando las medidas de seguridad y de distancia en las zonas asistenciales. La ocupación de pacientes con COVID-19 sigue siendo alta, pero empezamos a tener un número significativo de pacientes no COVID-19.
P: ¿Qué iniciativas solidarias hay actualmente en marcha?
R: Por un lado, no cesa la llegada de cartas de ánimo para los pacientes COVID-19. Son los profesionales de enfermería quienes las entregan en mano e incluso leen siempre previa consulta con el paciente para confirmar si es receptivo a la iniciativa. Al principio las recibimos a través de la iniciativa puesta en marcha por nuestros médicos residentes, que habilitaron una dirección de correo para recogerlas (covid.vallecas@gmail.com). Pero con el paso de los días han ido llegando infinidad de cartas y también dibujos infantiles, tanto de forma telemática como en papel, por otras vías (niños de la Parroquia San Juan de Dios, la Asociación Española contra el Cáncer…). Asimismo, la donación de tabletas portátiles nos está permitiendo poner en contacto a pacientes con sus familiares a través de video-llamadas. Ambas iniciativas contribuyen a aliviar la soledad y la situación de aislamiento a la que están sometidos nuestros pacientes por la pandemia de la COVID-19, que impide que puedan estar acompañados o recibir visitas. En este ámbito cabe destacar el importante trabajo que está realizando el equipo COVID-19 no asistencial de nuestra organización, un grupo de profesionales sanitarios y no sanitarios que da soporte en este tipo de iniciativas.
P: ¿Cuántas donaciones están recibiendo y cómo las canalizan?
R: La respuesta solidaria de particulares y también de empresas e instituciones ha sido abrumadora. Hemos recibido numerosas donaciones, fundamentalmente de material de protección sanitaria pero también de otro tipo (tabletas portátiles, gel hidroalcohólico…). Las donaciones se han canalizado a través de la Dirección de Gestión, centralizándose la recepción en almacén. No obstante, otras se han gestionado a través del circuito establecido por la Consejería de Sanidad para gestionar las donaciones (Dirección General de Inspección y Ordenación Sanitaria).
P: ¿Qué mensaje mandarían a la ciudadanía de Vallecas?
R: Para nosotros hubo un antes y un después a raíz de recibir la banderola que un grupo de jóvenes nos hizo llegar y pusimos en nuestra fachada, que dice: “Sólo el pueblo salva al pueblo. Trabajadores sanitarios sois nuestro orgullo. ¡Mucha Fuerza!”. Esto nos dio la dimensión del reconocimiento de nuestro trabajo y nos ha dado fuerza para sobrellevar con dignidad y ánimo los difíciles días que hemos pasado con tanto sufrimiento y dolor. Queremos agradecer la respuesta solidaria, impresionante, de la ciudadanía, tanto en las donaciones de material mencionadas anteriormente como en los aplausos diarios desde ventanas y balcones y también el apoyo a la puerta de nuestros hospitales de policías, bomberos, taxistas, operarios de recogida de residuos… Reconfortan a nuestros profesionales, les llegan al corazón y animan para seguir dándolo todo en la atención a nuestros pacientes. Igualmente es digno de reconocimiento el civismo de la población de Vallecas para cumplir las medidas de confinamiento y contribuir de esta forma a frenar la expansión de la COVID-19.
P: Para finalizar, algo que quieran destacar
R: El trabajo con las residencias de ancianos. Desde marzo del 2018 trabajábamos en el Proyecto Hospital Amable para la Persona Mayor con el liderazgo del Servicio de Geriatría, cuando llegó la COVID-19. Irrumpió sin pedir permiso y con la amenaza de arrasarlo todo. Después del primer golpe de impacto, el número de enfermos con COVID-19 era enorme y superaba con mucho la capacidad física del hospital, pero no superó la capacidad de los profesionales y nos pusimos a trabajar por y para los mayores más vulnerables, los que viven en residencias. Las primeras semanas fueron muy complicadas, pero pronto establecimos comunicación fluida con todas las residencias de nuestra zona. El geriatra de enlace ha estado disponible como consultor con un teléfono de 8 a 22 horas sin descanso tampoco los fines de semana. Hemos facilitado toda la medicación necesaria a través del Servicio de Farmacia, proporcionado oxígeno a todos los pacientes que lo necesitaban, dado apoyo médico, gestionado los traslados de los pacientes que necesitaban valoración en el hospital diseñando un circuito específico para que la atención fuera ágil, de la mayor calidad y en la mejor zona de urgencias, la zona de camas. Y lo más importante: hemos establecido unos lazos de compromiso con los pacientes que viven en las residencias de Vallecas que permanecerán cuando la COVID-19 termine. Estamos trabajando ya para mejorar la atención sanitaria de las personas que viven en residencias. Hay mucho trabajo por hacer. Ya hemos empezado. Si vuelve el COVID-19, si tenemos otra tragedia sanitaria como ésta, estaremos preparados. Queremos seguir atendiendo a nuestros pacientes de Vallecas en las mejores condiciones. Tras la COVID-19 ya nada va a ser igual, será necesario mantener distancias de seguridad y cambiaremos la organización de la atención, pero queremos que todos tengan la seguridad de que los profesionales de los hospitales de Vallecas están preparados para continuar dándoles la mejor atención.