Muchos participantes durmieron en la parroquia de San Carlos Borromeo y en casas de vecinos
Por Redacción Vallecas VA
Vallecas volvió a mostrar, una vez más, su solidaridad con motivo de las marchas de los pensionistas que llegaron a Madrid el pasado 15 de octubre y que partieron de Rota (Cádiz) y Bilbao a finales de septiembre organizadas por la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (COESPE). Sus vecinos y la parroquia de San Carlos Borromeo no dudaron en volcarse con el centenar de personas que acudieron a pie al centro de la capital. El templo de Entrevías les ofreció alojamiento y manutención, mientras que un buen número de vecinos cedieron de forma desinteresada sus viviendas para que los marchistas pudieran asearse y descansar. El colofón a este acto reivindicativo fue una manifestación que recorrió Alcalá, Cibeles y Neptuno el 16 de octubre, ante la imposibilidad de llegar al Congreso de los Diputados, donde miles de jubilados arroparon a los marchistas y portaron pancartas con lemas del tipo ‘Gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden’, ‘Trabajo digno para pagar pensiones dignas’, ‘Restaurar el valor de las pensiones’ o ‘Si sigues sentado, es que no te has enterado’.
Una jubilada de Vallecas que fue al encuentro de los marchistas cuenta a Vallecas VA lo vivido en primera persona lo vivido en estas intensas jornadas. “Estuvimos en Plaza de Castilla, esperando a la columna Norte. Cuando llegaron fue muy emotivo porque había cada vez más gente. De allí salimos a la Castellana y llegamos a Sol donde se encontraron las dos columnas. La verdad fue muy emocionante, porque los marchista no se esperaban que hubiera tanta gente para recibirlos”, comenta esta vecinal. “De allí fuimos al Congreso y dejaron sus zapatillas. Solo dejaban pasar a los marchistas, pero al final conseguir llegar al Congreso todos”.
“Luego cogimos el tren tanto la marcha Norte como la Sur y llegamos a San Carlos Borromeo. En el templo estaban ya las colchonetas para que durmieran y arriba la cena preparada a base de 50 raciones elaboradas por la escuela de hostelería gratuitamente y 30 donadas por la parroquia. La cena estuvo muy bien, la gente encantada. Hubo vecinos que se ofrecieron para llevarlos a sus casas si querían descansar y ducharse y bastantes personas se fueron con ellos”, añade.
Al día siguiente, el miércoles 16 de octubre, dice que los marchistas se levantaron muy temprado, desayunaron y salieron para Sol. “A las 10 de la mañana había mucha gente. Ha sido masiva, una tristeza que, como siempre, este Gobierno no ha querido que pasáramos por el Congreso poniendo vallas. Tuvimos que ir por Alcalá, Cibeles hasta llegar a Neptuno. Esta es un poco la historia de esta manifestación. La gente estuvo muy agradecida a Vallecas y a la parroquia”, concluye.
Reivindicaciones
Los manifestantes, entre otras demandas, exigieron que se blinden las pensiones como derecho fundamental en la Constitución y que por ley se revaloricen en función del IPC. Además, demandaron que se equipare al salario mínimo interprofesional (900 euros), que se eliminen los copagos sanitarios, que haya residencias de la tercera edad públicas, de calidad y suficiente y que se deroguen las dos últimas reformas laborales y de pensiones.