GRUPO TRABAJO MUJER
ASAMBLEA 15M VILLA DE VALLECAS
Hoy en día, en nuestra sociedad, afortunadamente, hemos evolucionado y el machismo es claramente minoritario. La Constitución proclama la igualdad de derechos, excepto en la sucesión del trono (que es arena de otro costal), y hace ya varios años que está vigente la Ley de Igualdad. En la actualidad casi nadie en España defiende públicamente la desigualdad entre hombres y mujeres o justifica que las mujeres tengamos menos oportunidades o derechos que los hombres. Parece que el planteamiento teórico está superado, que el MACHISMO, así en mayúsculas, se identifica con gente arcaica e inculta.
Sin embargo hay un machismo en minúsculas, más sutil, el machismo cotidiano del que muchas veces ni siquiera las mujeres somos conscientes. Es lo que denominamos “micromachismos”, comportamientos que denotan ese machismo social, cultural, que hemos aprendido de manera natural y sin darnos cuenta y que los varones utilizan para intentar mantener el dominio y su supuesta superioridad sobre la mujer objeto de la maniobra; reafirmar o recuperar dicho dominio ante una mujer que se “rebela” frente a “su” lugar en el vínculo; resistirse al aumento de poder personal de una mujer con la que se vincula, o aprovecharse de dichos poderes. Estas conductas se dan incluso en el hombre que se declara feminista y progresista. Muchas son espontáneas, no planificadas, aprendidas y reproducidas sin que los hombres sean conscientes.
La toma de conciencia y el reconocimiento de esta realidad es el primer paso imprescindible para poder combatir este “machismo de baja intensidad” e invisible a la mayoría. Puntualmente, estas maniobras pueden no parecer dañinas, incluso resultar naturales, pero su poder, devastador a veces, reside en la reiteración a través del tiempo, y puede detectarse por la acumulación progresiva de poder en los varones de la familia a lo largo del tiempo. Como ejemplos de micromachismo destaca la tradicional tarea relegada a las mujeres de los cuidados (cuidado de los bebés, de personas ancianas, enfermas, etc.), el paternalismo, el control del dinero o la falta de espacio propio/tiempo libre/intimidad de la mujer.
Los efectos de los micromachismos pueden ser devastadores: falta de autoestima, inseguridad, dependencia total de la figura masculina, agotamiento físico y mental, falta de comunicación en las parejas, resignación, etc.
De todos y todas depende identificar estos comportamientos para erradicarlos. Conseguiríamos así una sociedad igualitaria de la que nos beneficiaríamos todos los seres humanos, independientemente de su género.
El jueves 25 de abril a las 19:00, en el paseo de Federico García Lorca, junto a la A.V. La Unión y Kontrakorriente, participaremos en Vallecas Calle del Libro, con lectura de textos y poemas, regalo de libros escritos por mujeres y una exposición de mujeres en la literatura.
CONTACTO: avv.grupomujer@gmail.com |