Por Concha Párraga y Marisa Gascón, enfermeras de familia del CS Campo de la Paloma y del CS Ángela Uriarte
Salud y Educación son dos pilares claves en la infancia, y deben ser tarea de todos, poderes públicos, familias, docentes y sanitarios. La pandemia por COVID-19 ha evidenciado otra gran pandemia de nuestro siglo, la pobreza infantil y la desigualdad social, manifestándose claramente la brecha de desigualdad desde la infancia.
Todos juntos debemos proporcionar una vuelta al colegio segura, saludable, sostenible y garantizando la equidad. El curso académico 2020/2021 debe estar sustentado por medidas de prevención, higiene y promoción de la salud.
Medidas de prevención personal como higiene de manos, uso de pañuelos desechables, uso de codo para protección de toses y estornudos, distancia de seguridad, uso de mascarillas, limpieza y ventilación de las aulas y zonas comunes, gestión de los posibles casos y limitación de los contactos y, por supuesto, medidas trasversales que van desde la reorganización del centro, a la coordinación y participación y a la educación para la salud.
Ahora más que nunca se hace fundamental el compromiso de las familias con la comunidad educativa, pero siempre dentro del entorno de la seguridad. Si una familia sospecha que su hijo o hija puede ser COVID positivo, no deberá bajo ningún concepto llevarle al colegio hasta que no sea visto por un sanitario. Así mismo, si en la familia del menor hay un caso positivo, el niño o niña deberá seguir las medidas de aislamiento establecidas para evitar la diseminación comunitaria. Deberá ser compromiso también de la familia proporcionar a los menores el material perfectamente etiquetado para evitar posibles contagios cruzados (botellas de agua, desayunos, mascarillas de repuesto, etc…).
La familia deberá educar a sus hijos en las normas de higiene (lavado de manos, uso de mascarillas, uso de solución hidroalcohólica, etc..). Entre todos será mucho más fácil que los menores cumplan las medidas de prevención generales.
El colegio podrá establecer medios de comunicación con las familias de modo telemático. Es importante evitar las aglomeraciones en la puerta del colegio. Debemos respetar la distancia de seguridad y deberemos hacer uso de las mascarillas. El centro, por su parte, podrá plantear entradas y salidas escalonadas para evitar aglomeraciones. Además, siguiendo la normativa vigente en el momento, deberá nombrar un encargado de COVID y deberá establecer un protocolo a seguir en el caso de un posible caso.
El uso de las mascarillas en el trasporte escolar será obligatorio para todos los mayores de seis años. En las aulas su utilización estará sujeta a la legislación en el momento de apertura del curso escolar. Debemos también educar a los niños y niñas a cómo deben llevar puesta la mascarilla, como quitar y poner para que éstas no se conviertan en un transmisor del virus.
Familias, docentes y sanitarios tenemos que ser muy estrictos a la hora del uso de la mascarilla, ya que somos los referentes a seguir por los menores.
Hay que intentar que los niños y las niñas se muevan lo menos posible por las diferentes estancias del colegio para que disminuya el flujo de posible diseminación del virus, por lo que serán los profesores los que cambien de aulas para evitar los posibles contactos.
Grupos estables de convivencia
Para Infantil y primer ciclo de Primaria se podrán establecer grupos estables de convivencia para que los y las alumnas puedan tener un desarrollo psicoemocional positivo sin detrimento de su salud.
El cumplimiento de estas medidas es tarea de todos y nosotras, enfermeras de familia, debemos favorecer estrategias de educación para la salud en la comunidad educativa para la ayuda a la consecución del objetivo de Escuela saludable. Se deberán establecer una programación de educación para la salud ‘on line’ para ayudar al cumplimiento de las normas educativas, adecuando el lenguaje y recursos educativos a las diferentes edades.
Como veis, tenemos una gran tarea por delante, no podemos fallar a nuestros menores, los niños y niñas de hoy, los de la generación de la mascarilla, serán nuestros adultos del mañana y, entre todos, tenemos que proporcionarles un presente saludable y pleno en educación para conseguir que el futuro esté en sus manos. Solo si trabajamos todos juntos podremos aprobar “con nota” el curso académico 2020/21.