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REDACCIÓN
Decenas de personas se manifestaron el 26 de enero a las puertas del estadio de Vallecas, antes del inicio del partido entre Rayo Vallecano y Atlético de Madrid, para protestar por los despidos de trabajadores en Coca-Cola y el cierre de la planta de Fuenlabrada.
Los manifestantes hicieron sonar bocinas y corearon consignas alusivas al conflicto laboral, portando pancartas contra la política de la multinacional, que ha anunciado el despido de 750 trabajadores en España y el cierre de las plantas de fabricación de Fuenlabrada (Madrid), Alicante, Palma de Mallorca y Colloto (Asturias).
El Expediente de Regulación de Empleo en Coca-Cola no responde a pérdidas económicas de la empresa, sino a un “proceso de restructuración”, algo posible desde la última reforma laboral. La multinacional de refrescos, actualmente con 4.200 trabajadores en España, ajustará su plantilla en un 30% en una operación que afectará a 1.250 empleados. La dirección de Coca-Cola Iberian Partners, compañía resultante de la integración de las siete embotelladoras de Coca-Cola en España, comunicaba así a finales de 2013 la reorganización del embotellador único. Sobre el papel, unos 750 de esos empleados serán despedidos, mientras que otros 500 serán “recolocados” en otras plantas de la marca, extremo este último que los sindicatos ponen en duda. [/three_fourth]