Por Isa Mendi
Tras un enero ‘negro’ con un aumento significativo de pacientes ingresados por Covid en los complejos sanitarios de Vallecas, la llegada del mes febrero ha deparado una ligera bajada en la incidencia del coronavirus en los dos distritos, si bien la presión asistencial se mantiene alta y estable, en forma de meseta, según confirman a este periódico fuentes del Hospital Infanta Leonor. Profesionales de este centro aseguran, además, que la tercera ola ha atacado a personas de mediana edad, en torno a los 40 años, y que la mayoría de los contagios han venido a través de personas de confianza.
A pesar de esta leve mejoría, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid volvió a imponer el 8 de febrero restricciones de movilidad a los vecinos de la zona básica de salud de El Pozo del Tío Raimundo, unas limitaciones que estarán en vigor hasta el próximo 21 de febrero, al alcanzar una tasa de positividad de 959 casos por cada 100.000 habitantes.
“Los hospitales Infanta Leonor y Virgen de la Torre registran un significativo aumento del número ingresados por Covid desde mediados de enero”, explica la dirección de los dos centros de referencia de Vallecas. Sus responsables inciden en que, actualmente, están en una situación estable, de meseta, en torno a los 150 paciente ingresados entre ambos hospitales. Asimismo, señalan que están realizando numerosas derivaciones al Hospital de Emergencias Isabel Zendal (145 hasta el 29 de enero).
“En la UCI del Infanta Leonor la situación es compleja. Sigue por encima de su capacidad ordinaria, lo que obliga a seguir recurriendo a espacios adicionales para la atención de pacientes críticos, como la Unidad de Reanimación (REA) post-quirúrgica y el gimnasio de rehabilitación, que continúa habilitado como unidad de cuidados respiratorios intermedios (UCRI) para la atención de pacientes semicríticos y, además, está dotado de aire medicinal para atender a pacientes críticos en condiciones de máxima seguridad”, reconocen.
Esta circunstancia está provocado el aplazamiento de cirugías no urgentes y traslados puntuales de pacientes críticos a otros hospitales.
En primera línea
Los propios profesionales que están en primera línea dibujan un panorama similar. “Hemos pasado un enero muy malo, ampliando todo de nuevo para poder asumir lo que llegaba e incluso derivando unos 20 pacientes al día, más menos, al Zendal. A principios de febrero, estamos algo mejor y se nota una bajada importante”, dice a Vallecas VA una enfermera que trabaja en el Infanta Leonor.
“La mayoría de los pacientes iban al Zendal sí o sí y al final han derivado más de 300. Ha sido como la primera ola, o peor, teniendo en cuenta que el grupo infectado era más joven y con menos comorbilidad y si no se hubieran derivado…. Aun así, en el Infanta hay unos 80 enfermos de Covid, 13 de ellos en UCI, y en el Virgen, unos 60”, relata. “Lo que advertíamos los sanitarios de las Navidades se ha cumplido con creces y no esperábamos tanta irresponsabilidad, parece que no se ha aprendido nada”, se lamenta.
Por su parte, una profesional del Virgen de la Torre confirma que las plantas tercera y cuarta del hospital siguen dedicadas a pacientes Covid. Un escalón más abajo, en Atención Primaria, una enfermera de familia habla de que “la curva había aumentado de nuevo y que parece que tiene de nuevo tendencia a la baja. Es la tónica general en todos los centros de barrio”.
El Pozo, de nuevo confinado
Los vecinos de El Pozo tendrán restricciones de movilidad hasta el 21 de febrero. “La tasa de incidencia acumulada en nuestra zona básica de salud es alta. Otras nos superan y no están sometidas a un “confinamiento perimetral”. Pero no pasa nada, hemos pedido a nuestros vecinos que cumplan con la normativa. Así evitaremos estigmas que a mucha gente les enorgullece llevar a cabo”, dice la asociación vecinal de El Pozo en su cuenta de Twitter.