Por Juan Rodríguez
Fue el Yeclano-Rayo Vallecano uno de esos partidos trabados, duros de roer, que para desenredarlos hace falta o un crack o una desbrozadora. El Rayo optó por lo primero. Y por partida doble, además: Falcao y Raúl de Tomás, dos delanteros centros a los que no se les ha olvidado el noble arte del remate, liquidaron en el 88 y el 93 a un esforzado Yeclano, que nadó mucho para acabar ahogado en la orilla. Los de Yecla quedan apeados de la Copa, pero se pueden ir orgullosos del trabajo realizado, ya que tuvieron hora y media convencidos a sus fieles de que el cartel que presidía una de las gradas (“En Yecla todo es posible”) era cierto.
Y es que la cosa pintaba a prórroga sí o sí. Aquello no había forma de moverlo, por más cambios que introdujera Francisco (el goteo de titulares para desatascar el empate fue continuo). El 0-0 parecía esculpido allí en piedra. Inamovible. Tuvo que subir una marcha el Rayo en los minutos finales para evitar la prórroga y fueron dos nueves de los de toda la vida (ni bascular, ni asistir, estos son de embocarla dentro) los que le dieron una sufrida victoria al equipo.
Pese al regular desempeño de los vallecanos en el partido, si lo miramos con buenos ojos podremos observar que el parto trajo varios bebés y que “La Copa Mola”, como nos insisten desde la (maltrecha) Real Federación Española de Fútbol. Para empezar, el Rayo “cruza la pasarela” y se mete en la tercera ronda de Copa. Para continuar, RDT recupera parte del ‘flow’ perdido con un golazo que se celebró a medias (unos segundos de confusión ‘lynchiana’ llevaron al equipo, a la grada y a los televidentes a dudar de si su trallazo con la zurda había entrado por la escuadra… o por detrás de la red). Y, para terminar, Falcao sigue aumentando sus números en la Copa del Rey, un gol más al zurrón, tras los dos anotados en la primera ronda.
El Yeclano hizo el partido esperado, frenando el juego rayista y llegando con peligro al área de Dani Cárdenas cuando la ocasión lo permitía (en el 17 Silvente la mandó fuera solo ante el guardameta, en el 28 Pedrosa casi la clava junto al palo, en el 85 Pathe Ciss desactivó una clara llegada al área pequeña). El Rayo se puso el mono de trabajo desde los primeros minutos, sabedor de que tendría que picar mucha piedra para clasificarse. Las llegadas al área de Sergio Díaz eran escasas y sin peligro. El oasis en el desierto llegó nada más comenzar la segunda parte: De Frutos la mandó al palo en una buena maniobra ante el portero.
Francisco, como toca en esta competición (debe figurar por contrato en algún documento no revelado a los aficionados), renovó completamente el equipo en todas las líneas: Dani Cárdenas, Nteka, Bebé, Aridane (que cuajó un estupendo partido), Martín Pascual, RDT… Como decimos, la entrada de titulares a medida que pasaban los minutos fue continua y acertada. El partido cada vez se inclinaba más para los franjirrojos, hasta que llegó el premio del gol cuando la prórroga parecía inevitable. El Yeclano nunca tiró la toalla, tuvo que ser el Rayo el que se la quitara de las manos.
El próximo partido del Rayo será el 11 de diciembre a las 21 horas en casa contra el Celta de Vigo.
El ranking:
El héroe del partido: Unai López. Su entrada en el minuto 75 fue decisiva para aclarar las jugadas de ataque. Suyo es el pase a Falcao en el gol que abrió la lata, tras un buen centro lateral de Pozo.
El villano: Nteka notó la falta de actividad y no estuvo acertado en el ataque. En el 52 golpeó al defensor Algisi en lugar de al balón cuando se presentaba una buena oportunidad.
El datito: Los cánticos de “¡Sí se puede!” en la grada llegaron apenas tres minutos antes de que Falcao certificara la eliminación del Yeclano. El fútbol puede ser muy cruel.