Por Juan Rodríguez
¿A qué huelen las nubes de Getafe? ¿Qué resto dejan las estrellas en el cielo del Coliseum? ¿Es la gravedad tan imponente como dicen?… Estas, y algunas otras, son las preguntas que me hubiera gustado hacerle al balón del Getafe-Rayo. Quizá él, desde su perspectiva aérea, siempre volando sin que nadie le echara el lazo sobre el césped, hubiera podido arrojar algo de luz a esta crónica (negra) del apagado derbi madrileño de la segunda jornada de liga. Desafortunadamente, no es un balón, sino un servidor el que debe glosar la vida y milagros de un partido sin historia… deseadme suerte, la voy a necesitar.
Antes de nada, lo que tenéis que saber es esto: James Rodríguez ya lo tiene hecho con el Rayo para unirse a los franjirrojos a modo de guinda en el pastel del Centenario. El Harry Potter colombiano (o me vais a decir ahora que esa zurda no es capaz de crear mil magias y hechizos) viene a reforzar el ataque rayista y, en principio, firma por solo un año, lo que me indica que viene a ganarse el pan, no a una especie de retiro dorado. Y es que el cafetero de 33 años (aún con cuerda para rato, no en vano fue nombrado mejor jugador de la última Copa América) ha rechazado jugar en Estados Unidos y Arabia para volver a jugar al fútbol en Madrid, que no en el Madrid. Y, ¿sabéis qué? Que como Íñigo Pérez le de los mandos del equipo, nos vamos a divertir.
Que es precisamente lo que no tuvimos en este Getafe-Rayo, diversión (¡cómo hilo, qué destreza, esto no te lo firma el balón ese de las nubes!). Porque del encuentro puedo decir muchas cosas: que si fue sufrido, esforzado, disputado hasta el último minuto, jugado a cara de perro, con los dos equipos pendientes de no cometer ningún error, donde se notaba que aún estamos en agosto, blablablá… todo lo que queráis, pero ¿diversión, emoción, algo que llevarse a la boca por los aficionados al fútbol? Nada de nada. ¡Si no se registró un solo tiro a puerta en todo el partido!
Bueno, venga, un regalito sí hubo: un caño sideral de Isi casi sobre la línea lateral allá por el minuto 91. Una pena que uno de los jugadores con más clase de la plantilla rayista no entrara en el campo hasta el minuto 63. Y es que Íñigo Pérez, por esas cosas indescifrables que tienen los entrenadores, decidió que era mejor salir de inicio en el Coliseum sin Isi, Álvaro y Camello. Que a lo mejor dices, bueno, vale, partido contra el Getafe de Bordalás en su casa, duelo de pierna dura y disputas, poca broma… pues me reservo a los violinistas (Unai López también empezó en el banco de suplementes); de acuerdo, te puedo comprar el argumento. Pero, ¿¿empezar el partido sin Camello sobre el césped?? ¿El tipo más on fire del fútbol español? ¿El delantero más afinado del Rayo en el último medio año, el que me está cerrando la boquita a mí, que tanto pedía un delantero en el mercado de verano? Bueno, pues sí, ese Camello. En el banquillo. Arriba en la punta estaba Nteka. Que desgastó a los centrales del Getafe más que un sacapuntas a un lápiz, pero lo que es tirar a puerta, meter goles o generar ocasiones… de eso, poco.
Tenía muchas cosas apuntadas en mi libreta a las que agarrarme por si no podía armar una crónica decente: Cárdenas en la portería (a la espera de comprobar si Batalla, ex del Granada, llega o no para ser titular -se supone que sí, Batalla es un porterazo-), Uche reconvertido en delantero centro ante la ausencia de refuerzos de Bordalás, la polémica camiseta del centenario del Rayo (es un “100” muy bonito a base de rayos, pero no es la franja de toda la vida)… pero ya habrá tiempo de ir desgranando estas y otras historias. Quedémonos con que este Getafe-Rayo, simplemente, no tuvo historia, como ya os decía al principio (el que avisa no es reventador de spoilers, como todos aquellos que veían ‘Perdidos’ antes que tú y te chafaban lo de Not Penny’s Boat, por ejemplo). Si acaso, la de dos supervivientes ya asentados en la máxima categoría del fútbol español que luchan precisamente por eso, por seguir siéndolo. Bien sabe el Rayo lo que cuesta, a tenor de lo que sufrió para mantenerse en primera la temporada pasada. Esperemos que esta, que empezó con una sonada (y merecida) victoria en el campo de la Real Sociedad en la primera jornada, acabe exactamente igual que la anterior. Ese sería un Centenario como Dios manda (por cierto, ¿os he dicho que viene James? Sí, ¿no? ¡Que viene James!).
El próximo partido del Rayo es el martes 27 de agosto a las 21:30 horas contra el Barcelona en casa.
El ranking:
El héroe del partido: TJP o, lo que es lo mismo, el Chocota Trejo. En un partido sin grandes individualidades, el ex-capitán del Rayo completó una sólida actuación participando en el poquito juego ofensivo que generó el equipo (suya fue la mejor ocasión de los vallecanos). Por cierto, que el “JP” de su camiseta es su particular homenaje a Juan Pedro Navarro, exdirector del fútbol base fallecido hace más de un año.
El villano: Nabil Aberdin. Si bien el central francés de 22 años del Geta apenas tuvo un desliz en todo el partido, lo cierto es que fue un desliz muy notable, de esos que te lías, te lías… y acabas cayendo al vacío (como aquel vídeo ganador de ‘Vídeos de Primera’ titulado “Se va el chaval, se va por el barranquillo”)… y es que la entrada que le hizo Aberdin a Trejo en el minuto 42 de la primera parte fue casi personal, una especie de vendetta, como si TJP le debiera dinero o algo, ¡Aberdin, controla tu ira, muchacho!
El datito: De sus últimos siete enfrentamientos, es la cuarta vez que Getafe y Rayo empatan a cero (dato a apuntar por todos aquellos que vayan a sacar una entrada para el partido de vuelta…)
La pregunta: ¿Cuántas publicaciones en Instagram y fases en Duolingo se pasaron en los móviles de los espectadores del Coliseum para soportar el fastidioso partido que nos regalaron ambos equipos?
Declaraciones
Íñigo Pérez: «Un punto fuera de casa siempre tienes que valorarlo como positivo. Hemos competido bien. Era un partido muy difícil de jugar para los dos y el equipo supo adaptarse. 4 puntos en dos salidas y con sensaciones para estar satisfecho».
Lejeune: «Sabíamos que iba a ser un partido muy duro, con muchos duelos, muchas segundas jugadas y estuvimos bien. Portería a cero y sumamos 4 puntos en las primeras dos jornadas. Ahora a recuperar rápido para el martes».