Cuidamos Vallecas
Desde la Junta Municipal de Distrito de Puente de Vallecas, a través del programa Cuidamos Vallecas, queremos conmemorar el Día del Medio Ambiente que se celebra el 5 de junio. Es necesario respetar y cuidar de nuestro entorno para reducir los impactos ambientales derivados de la actividad humana.
Bajo el marco de una pandemia global, desde que se decretó el Estado de Alarma, se han evidenciado cambios en términos ambientales. Estos cambios pueden poner de manifiesto la necesidad de replantearnos hábitos y costumbres.
La biodiversidad urbana ha cambiado con el confinamiento. Sin el ruido del tráfico, de los transeúntes, las obras… las aves han modificado sus cantos ya que no necesitan hacerse oír por encima del ruido. Algunas especies terrestres y acuáticas se han atrevido a recuperar espacios que habían perdido ya que estaban ocupadas por humanos y han desaparecido los consiguientes peligros para esta fauna, la vegetación ha colonizado esas zonas donde no se le permitía crecer… Estos cambios evidencian la necesidad de respetar el entorno que compartimos con otras muchas especies y minimizar nuestro impacto.
En materia de movilidad, a nivel global y con respecto al mismo periodo del año anterior, se ha registrado una caída de hasta el 50% del transporte terrestre. Como consecuencia de ello ha habido una caída en el consumo de combustibles fósiles y, por tanto, de las emisiones de gases nocivos para la salud y que contribuyen al cambio climático como el dióxido de carbono y el dióxido de nitrógeno, que en ciudades como Madrid ha descendido hasta un 60%.
Movilidad urbana
Al mismo tiempo, la movilidad urbana ha experimentado un cambio hacia la bicicleta, que se presenta como la alternativa ideal durante y tras el confinamiento. Se ha presentado un plan de choque para la promoción de la bicicleta en el que se señala que este medio es la mejor solución para el transporte en la nueva situación. En su favor se argumenta que es muy económico; facilita el distanciamiento físico; no contamina, por lo que no agrava el estado de salud de las personas enfermas por la COVID-19 u otras afecciones respiratorias; no contribuye al cambio climático; activa la salud física y emocional; y es el medio más rápido para distancias de hasta 8 kilómetros, las más habituales en medio urbano.
Durante el confinamiento el pequeño comercio se ha visto afectado, pero al mismo tiempo se han creado redes de solidaridad para ayudar a estos pequeños negocios y nos empezamos a replantear nuestro consumo para favorecer un modelo más sostenible, fomentando el comercio local y de cercanía, de los que tantas familias dependen.
Estos y otros muchos ejemplos nos pueden ayudar a replantearnos modelos de conducta, de movilidad o de consumo entre otros, de forma que nuestra huella en el ecosistema sea más sostenible, social, económica y ambientalmente.