Por Manolo Jiménez
El Rayo Vallecano perdió casi todas sus opciones de conseguir algo positivo en el derbi frente al Atlético de Madrid en el leve intervalo de tres minutos, periodo en el que encajó dos goles en dos errores. Aún así, los franjirrojos no perdieron la cara al choque, incluso con un hombre menos durante más de media hora, e incluso llegaron con opciones a la recta final del encuentro, gracias al gol de Fran García. A pesar de este traspié que supone el octavo encuentro consecutivo sin conocer la victoria, los de Iraola siguen en mitad de tabla, novenos, con un cómodo colchón de 10 puntos con los puestos de descenso.
La igualdad fue la tónica predominante en los primeros compases del encuentro hasta que en el minuto 21 una falta a favor del Rayo, botada por Isi, permitió a los de Simeone montar una vertiginosa contra que, en cuatro toques, permitió que el balón acabara en el fondo de la red impulsado por Nahuel Molina. Y casi a renglón seguido, en el 24, Mario Hermoso anotó el segundo de cabeza a la salida de un córner. A pesar del mazazo, los vallecanos se fueron recuperando con el paso de los minutos y gozaron de tres ocasiones en las botas de Álvaro García, Raúl de Tomás y Óscar Valentín para acortar distancias en el marcador antes del descanso.
Tras el paso por los vestuarios, los locales se hicieron con la iniciativa, pero el panorama cambió sobremanera tras la expulsión por roja directa de Lejeune en el 61. El técnico local no dudó en arriesgar a pesar de la inferioridad numérica y con los más espacios el Atlético pudo sentenciar a la contra, pero la gran actuación de Dimitrievski mantuvo vivos a los suyos. A falta de 5 para el final llegó el golazo de Fran García, que desató el delirio de su afición, pero que no fue suficiente para hacer peligrar el resultado final.
“Cometimos errores que cuestan puntos”, aseguró el entrenador del Rayo, Andoni Iraola, al término del encuentro.
El Rayo volverá a jugar en casa el próximo viernes 14 de abril, a partir de las 21 horas, contra el Club Atlético Osasuna de Jagoba Arrasate, equipo revelación del campeonato y flamante finalista de la Copa del Rey.