Por Pedro Lorenzo
El director, dramaturgo y actor Josep María Flotats da una lección magistral acerca del arte dramático, cómo se va construyendo un personaje y el arduo recorrido hasta conseguir el papel. Lo hizo hace ya 20 años con el mismo texto de Louis Jouvet y por el que obtuvo el Premio Ercilla a la mejor creación dramática en 2003.
Son siete clases magistrales de Jouvet, a quien Flotats llama el maestro de sus maestros, a unos alumnos que trabajan una escena de la ‘Elvira’ de ‘Don Juan’ de Molière, en el Conservatorio Nacional Superior de Arte Dramático de Paris en 1940, cuando la capital francesa estaba ocupada por los nazis. Louis Jouvet seguía impartiendo sus clases mientras su secretaria iba transcribiendo sus diálogos para los pupilos, que recogería en grandes volúmenes de teatro clásico, tragedia, tragedia clásica y comedia clásica, como en este caso, y que posteriormente a través de sus herederos, publicó la editorial Gallimard. Queda una nítida constancia de la época por la música militar y enseña que ondea en el teatro al principio de la obra.
Josep Maria Flotats, miembro de la Société de la Comédie Francaise, Orden de la Artes y las Letras en Francia, nace el mismo día y mes que Molière. En el 400 aniversario del nacimiento de su “patrón”, tuvo el encargo de Helena Pimienta de montar en el Teatro Clásico ‘El enfermo imaginario’, estrenado en noviembre de 2020, texto que también representó el grupo Morboria en el mismo escenario. Quienes vieron esa obra dirigida y protagonizada por Flotats no podrán olvidar su papel como Argan. Es también memorable su ’Voltaire/Rousseau. La disputa’ en su papel como Voltaire, que colgó el cartel de entradas agotadas durante 40 días en el CDN. Al igual que su interpretación en ‘Arte’ y en tantas otras. En todas sus obras se observa su pasión por el teatro, su oficio y excelencia.
Aquí dirige, interpreta, diseña el espacio escénico y el vestuario, por algo es Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en España. Es una leyenda viva de las tablas y siempre que hace cualquier montaje, siempre va a ser muy elaborado. Destacar también a su sempiterno traductor Mauro Armiño. Si quieren ver cómo se trabaja un personaje, no se pierdan esta obra.