La III edición de ‘Vallecas con K de Kultura’ estuvo plagada de música, juegos, bailes y diversión para todas las edades con la intención de promover la cultura y el desarrollo de los lazos vecinales
Por Guillermo Belinchón
El Festival popular ‘Vallecas con K de Kultura’ finalizó el pasado sábado 10 de julio después de más de un mes plagado de actividades culturales organizadas por distintos colectivos vecinales, grupos culturales, activistas y residentes.
Esta iniciativa se convocó por iniciativa del vecindario del distrito de Puente de Vallecas con la intención de querer buscar una forma de fomentar la cultura y los lazos vecinales, una ambición que los ha llevado a organizarse y crear una serie de programaciones culturales en todo tipo de ámbitos: musicales, poéticos, deportivos y teatrales entre otros. Todos ellos con un trasfondo reivindicativo para alcanzar una mejora en la situación actual de Vallecas.
“Nosotras lo que queremos es fomentar la cultura entre las familias y el barrio, que eso no se pierda. Nuestro objetivo es crear lazos de solidaridad y de barrio. Como dice el eslogan: ‘haciendo barrio creamos pueblo’”, explicaba Eva, integrante de Somos Tribu VK.
Entre los colectivos que formaban el evento se encontraban la Asociación de Vecinos del Alto del Arenal y de Palomeras Bajas, el colectivo la Horizontal, La Villana, las escuelas de charangas, la Batukada de La Kalle, Somos Tribu Vk, el Patio de Vallecas, la Cofradía Marinera de Vallekas, la Plataforma en Defensa d la Sanidad Pública y La Atalaya.
Las actividades mañaneras
La programación del sábado contó en un primer lugar con un pasacalles, donde los diferentes asistentes se congregaron en el Centro de Salud Angela Uriarte y realizaron una marcha hasta la Plaza Roja, haciendo paradas en lugares icónicos vallecanos como lo son el CSO Atalaya, el CEIP Javier de Miguel y el antiguo recinto ferial, espacio donde se celebran habitualmente las Fiestas de la Karmela. En cada una de las paradas se reivindicaba un derecho: en la primera el derecho a la sanidad; en la segunda el derecho a la vivienda y a la alimentación; y en la última el derecho a la cultura.
En esta última parada, Javo, de la Comisión de Fiestas de la Karmela, quiso pronunciarse frente a todos los participantes y arremeter contra los dirigentes municipales. “Las administraciones quieren construir una nueva Junta Municipal en el espacio donde celebramos nosotros las Fiestas de la Karmela, y en un futuro el barrio quería utilizar ese espacio para construir un escenario y que fuese una zona polivalente para nuestras actividades. Pero resulta que el nuevo ayuntamiento ha decidido que eso no será posible y ha preferido dejarnos sin recinto ferial para las fiestas. Nos parece muy mal lo alejadas que están las Instituciones de los intereses del barrio”, puntualizaba.
El pasacalles estuvo acompañado en todo momento de instrumentos de la Samvallecas Batukada que generaban un ambiente festivo, invitando a los vecinos que se habían quedado en casa a asomarse por la ventana al escuchar la música y amenizando las dos horas que duró la caminata hasta el destino fijado. “Las distintas batucadas de Vallecas nos hemos juntado y hemos creado un repertorio común. Hoy es un día grande y me da la impresión de que esta idea de ‘Vallecas con K de Kultura’ va a continuar. La idea es sacar la cultura a la calle, generando cultura y barrio”, aseguraba Gonzalo Sarmiento, director cultural de la Asociación La Kalle.
La marcha finalizó en la Plaza Roja, donde en su zona céntrica esperaba la charanga para recibir a todos los asistentes. Una vez finalizada, se dio paso al último evento mañanero programado antes del descanso, un recital de poesía de la mano del grupo Genoma Poético y del colectivo Sonoridades. “Me ha parecido muy necesario todo lo que han organizado estas personas, se nota su preocupación por nuestro barrio y eso es de agradecer”, afirmaba una de las asistentes de la Plaza Roja.
Bailes, música, eventos y boxeo
La segunda parte del evento se reanudó a las 19 horas con talleres de swing y de boxeo. Mientras tanto, los más jóvenes también tuvieron su espacio de diversión en la zona infantil, que contaba, entre otras actividades, con cuentacuentos y pintacaras.
La música se manifestó más adelante con los bailes tahitianos, que invitaban a los asistentes a unirse al son de la coreografía, seguidos minutos después por los dos conciertos de música que sirvieron para cerrar el evento programado: el grupo Chapapúas, una mezcla de estilos entre el punk y el rock; y por último La Vallekana Sound System, al son de rock con flamenco, rap y otros géneros variados.
La Policía estuvo en todo momento presente a lo largo de la jornada sin necesidad de intervenir. Al terminar todas las actividades, los convocados limpiaron toda la basura amontonada por un evento de este calibre, pero se mostraron decepcionados por la dejadez de la Delegación de Gobierno. “Cuando se terminaron las actividades recogimos todo lo que pudimos porque la Delegación del Gobierno, la encargada de mandar un grupo de limpieza cuando hay una convocatoria o manifestación, no acudió”, explicaba Maro, una de las organizadoras del grupo.
La idea a largo plazo, según cuenta Maro, es que ‘Vallecas con K de Kultura’, se convierta en una plataforma que sirva como punto de encuentro cultural para vecinos que no estén organizados y para que a distintos colectivos les sirva de apoyo en la realización de sus objetivos. “Sí que tenemos en mente seguir generando cultura y visibilidad, quizás con eventos más pequeños, pero más de manera cíclica”, añadía.