Por Torresrubí
Esta es una pregunta que preocupa a muchas familias españolas. Tanto el precio de los alquileres como el de las viviendas en propiedad han experimentado un aumento significativo en los últimos 10 años, dificultando el acceso a una vivienda adecuada para muchas personas.
El elevado coste de la vivienda no solo impide a muchas personas formar un hogar, sino que también afecta a quienes ya han logrado adquirir o alquilar una vivienda. Estas familias ven una reducción considerable en sus ingresos disponibles después de pagar la hipoteca o el alquiler. Si se lograra reducir el precio de la vivienda, no solo se crearían más hogares, sino que también mejoraría la calidad de vida de muchos que ya tienen un hogar.
Para abordar esta problemática, es esencial entender por qué los precios de la vivienda han subido tanto. La primera razón es que en 2014 aún estábamos empezando a salir de la crisis de 2008, por lo que los precios estaban muy por debajo de los precios de 2000-2008.
Hay además muchas teorías al respecto: desde la concentración del mercado en manos de grandes corporaciones como Black Rock, hasta la proliferación de apartamentos turísticos y la especulación con viviendas vacías. Sin embargo, la explicación más directa desde una perspectiva económica es el desequilibrio entre la oferta y la demanda.
En economía, cuando la demanda de un bien, en este caso, la vivienda, supera significativamente a la oferta, los precios tienden a subir. Si hay más personas buscando comprar o alquilar viviendas que unidades disponibles, los precios inevitablemente aumentan. Según la Encuesta Continua de Hogares del INE, el número de hogares en Madrid aumentó de 2.496.000 en 2013 a 2.612.000 en 2020.
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