Por Torresrubí
Estamos en la época del año en la que tenemos que hacer nuestra declaración de la Renta. A continuación, te contamos cómo tributan las viviendas pues, aunque estemos exentos del pago, debemos incluirlos.
La vivienda habitual no tributa en el IRPF. Si firmaste la hipoteca antes de 2013 eres de los afortunados que pueden deducirse el 15% de ésta, siempre que no se superen los 9.040 €. Cuando no se trata de la vivienda habitual, debemos pagar el 1’1% sobre el valor catastral.
Si tenemos una segunda vivienda y la alquilamos, podremos deducirnos el 60% de las rentas. Pero, además, si hemos hecho alguna inversión como cambiar un electrodoméstico, enviar un fontanero o pintar el piso, podemos deducir los gastos.
Si la vivienda que alquilamos tiene garaje y/o trastero y se alquilan juntos no suma a las rentas. Por el contrario, si los alquilamos por separado, habrá que hacer la declaración del IVA. Si la vivienda la hemos destinado al alquiler turístico habrá que pagar IVA, pero no se podrá optar a la reducción del 60%.
Si durante 2020 vendimos un inmueble, hay que pagar en el IRPF la ganancia patrimonial, aunque hay algunas exenciones: si la venta es de vivienda habitual y se reinvierte o si el vendedor tiene más de 65 años. Si se ha vendido a pérdidas, tampoco habrá que pagar el IRPF y esas pérdidas se pueden compensar con otras ganancias patrimoniales durante los 4 años fiscales siguientes.
Las ganancias patrimoniales tributarán al 19% los primeros 6.000 euros, el 21% entre 6.000 y 50.000 euros y el 23% a partir de 50.000.
En Torresrubí nos preocupamos de dejar claro los gastos de cada transacción. En el momento de la valoración gratuita también podemos hacer un cálculo de impuestos para que no haya sustos.
Vender por debajo del precio de tasación no es la solución para pagar menos impuestos, pues en la Declaración de la Renta, Hacienda nos exigirá el pago por su valor del mercado. El comprador deberá pagar ITP por el valor del mercado y el vendedor IRPF por este mismo importe.
Como podéis ver, el trabajo de un agente inmobiliario no se limita a enseñar el piso. La documentación, el cálculo de impuestos, la publicidad para conseguir comprador y nuestra formación garantizan el éxito de una compraventa y sin dolores de cabeza. Si estás pensando en vender, ven a nuestra oficina de la calle San Claudio.