Por Francisco Catalán
Vecinos y vecinas, convocados por 13 organizaciones apoyadas por el Movimiento Vecinal, la FRAVM y Marea Verde, entre ellas, la Escuela Pública de Tod@s para Todo@s, Ecologistas en Acción, CONFAPA, MED-SAP, Federación de Salud Mental y CGT, se concentraron el 18 de diciembre frente a la Asamblea de Madrid vecinas.
En el interior de la cámara regional, se estaban debatiendo los presupuestos de la Comunidad para el próximo año que debían ser votados al día siguiente. Las personas allí reunidas reclamaron que los presupuestos públicos se dedicaran a servicios 100% públicos, con gestión directa que garantice el cumplimiento de los derechos a los que van destinados sin externalizaciones, sin mercantilización que parasite y desvíe beneficios de sus auténticos destinatarios, sin colaboración público-privada que es una puerta de entrada al negocio en la educación, en la salud –véase el desdichado testimonio del Hospital de Torrejón que estos días ha protagonizado debates y noticias en televisión y en distintos foros-, en servicios sociales, en residencias y en elementos fundamentales del estado de “medio estar” en el que vivimos.
Las reclamaciones volaban: ‘Sanidad Pú –bli- ca’; ‘Nada, Nada, Nada, para la Privada’, ‘Educación Pública y de Calidad’, ‘Universidad Pública’, ‘Todas las madrileñas, tenemos un deseo, que para la privada no haya dinero, dinero por aquí, dinero por allá, la pública palante, privada patrás’, críticas a Ayuso por su gestión… En definitiva, se manifestaron a favor de revertir un proceso de privatización galopante que lleva cabo la Comunidad de Madrid conforme a su ideología de favorecer el negocio por encima de los intereses de los ciudadanos.
Un par de ejemplos: Mientras Ayuso presume de unos presupuestos históricos por valor de 30.663 millones de euros, en el análisis de estas cuentas para el 2026 CCOO concluye que los conciertos con la educación privada se llevan el 20%, el doble que hace dos décadas. Se reduce el alcance de becas y ayudas, con 84.000 beneficiarios menos que en 2025, según datos de ‘El País’.

En salud, los presupuestos han aumentado un 6,98% respecto al 2025, pero Madrid es por sexto año consecutivo la autonomía con menor crecimiento de la dotación sanitaria per cápita: 1.537,28 euros por habitante, 55 euros más que el pasado año, pero la media nacional se sitúa en 2.013 euros por ciudadano lo cual significa infrafinanciación, con las graves consecuencias que experimentamos todos los días: seguirán las listas de espera interminables en la Primaria, dificultad de acceso a especialistas, déficit de material, etc.
Aviso a la ciudadanía: nos la estamos jugando y no estamos ganando. Se necesita un compromiso firme y una movilización ciudadana sustancial para evitar este proceso que está empeorando las condiciones de vida de todas y todos, pero especialmente de la población más vulnerable. Registramos apatía y conformismo en importantes sectores de nuestra población. Démosle la vuelta, Ahora.








